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La EM y la sensibilidad al calor: cinco maneras de controlarla

Con la revisión médica del Amit M. Shelat, D.O.
Artículo escrito por Joan Grossman
Posted on February 13, 2024

“Si tengo calor, estoy débil”, comentó una miembro de MyMSTeam. “Un ligero aumento de la temperatura por encima de los 70 °F y tambaleo. El calor es malísimo”, compartió otro miembro.

Muchas personas que tienen la esclerosis múltiple (EM) son sensibles al calor y a los cambios en la temperatura corporal. Hasta un cambio de un cuarto de grado o medio grado en la temperatura central puede desencadenar de forma temporaria síntomas de EM. Ambientes sobre los que otras personas tal vez ni siquiera recapaciten —como un jardín húmedo, una habitación mal ventilada o una ducha caliente— pueden empeorar los síntomas de EM. A esto se lo denomina el fenómeno de Uhthoff.

Los efectos del calor en el empeoramiento de los síntomas de EM están tan bien establecidos que antes de la invención de las resonancias magnéticas, los médicos solían realizar una prueba de baño caliente a las personas que sospechaban que tenían la EM. Si los síntomas neurológicos de la persona de pronto empeoraban en el agua caliente, el médico suponía que su diagnóstico era correcto.

Por suerte, estas pruebas ya no son necesarias en la actualidad. Con un poco de planificación y preparación, las personas con EM pueden utilizar estrategias para evitar las complicaciones de la sensibilidad al calor.

¿Cómo se siente la sensibilidad al calor a causa de la EM?

Los miembros de MyMSTeam a menudo hablan sobre la sensibilidad al calor y los cambios de temperatura.
“No me molesta tener frío —señaló una miembro—. Es el calor el que me recuerda que la EM es la que aún manda”.

El calor puede afectar los niveles de energía y la movilidad. Un miembro describió los días calurosos de la siguiente manera: “Es como si intentara caminar a través de gelatina y todo me doliera”. Otra miembro declaró: “Me invade un cansancio profundo y me siento obnubilada”.

“A mí también me da demasiado calor y tengo una reacción parecida a un golpe de calor, además de que me mareo y siento náuseas”, añadió otro miembro.

Muchos miembros de MyMSTeam indican que el calor limita su productividad. “Continuamente tengo calor excesivo; dificulta hacer cualquier actividad”, comentó una miembro. Otro dijo: “En días de calor parece que me canso más rápido, así que me doy un poco más de tiempo para realizar tareas”.

Una miembro contó que en un viaje a un destino vacacional caluroso acabó hospitalizada. “¡¡El calor y la humedad son mis enemigos!! Fui a una reunión familiar, y el calor y la humedad hicieron que mi EM se agravara considerablemente. Me dio el horrible abrazo de la EM, sentía que no podía respirar y perdí el conocimiento”.

Síntomas de EM e intolerancia al calor

Los síntomas de EM que más suelen asociarse con la intolerancia al calor son los siguientes:

  • Cansancio
  • Dolor
  • Dificultades para concentrarse
  • Visión borrosa
  • Debilidad o espasticidad muscular

Un miembro de MyMSTeam apuntó que sus síntomas musculares empeoraron en el calor: “Durante las olas de calor —escribió— las buenas piernas decidieron iniciar una encarnizada pelea conmigo”.

Los síntomas de EM causados por la sensibilidad al calor por lo general son temporarios, ya que suelen desaparecer una vez que el cuerpo se enfría.

Es importante tener en cuenta que los síntomas o exacerbaciones que recrudecen a causa del calor también pueden acarrear riesgos de salud secundarios. Según lo explicó un equipo de investigadores, la sensibilidad al calor de las personas con EM guarda una estrecha relación con el cansancio. Al combinarse con problemas de la memoria y la debilidad muscular, sentir agotamiento y ser sensible al calor pueden aumentar el riesgo de caídas accidentales.

Lea acerca de las sensaciones extrañas y la EM.

¿Cómo empeora el calor los síntomas de la EM?

En las personas con EM, el sistema inmunitario del cuerpo ataca el sistema nervioso central, lo que causa inflamación y despoja a los nervios de su mielina (capa protectora). Este proceso, conocido como desmielinización, hace que los nervios se vuelvan vulnerables y reduce su capacidad de transmitir señales eléctricas al cerebro.

En investigaciones se ha indicado que cuando una persona con EM siente un aumento en la temperatura central, la conducción neural (la transmisión de mensajes a lo largo de las fibras nerviosas) se desacelera. En algunos casos, es posible que se bloquee por completo, y puede causar un empeoramiento de los síntomas de EM. La gravedad de la exacerbación depende del grado de desmielinización de la persona y de cuánto ha aumentado su temperatura central.

¿Cómo tener la EM afecta su temperatura corporal?

La EM puede afectar negativamente la capacidad de una persona de mantener una temperatura corporal sana. Si a una persona le afecta una lesión en un área del cerebro que regula la temperatura central o las reacciones de enfriamiento (como la sudoración o circulación), es posible que no pueda adaptarse a un ambiente más caluroso.

La intolerancia al calor, o una elevada sensibilidad al calor, es uno de los síntomas más comunes de la EM. Esta manifestación afecta a entre el 60 por ciento y el 80 por ciento de las personas con EM. Dichas personas podrían pasar por una seudoexacerbación (un recrudecimiento temporario del síntoma) si aumenta su temperatura corporal. Los ambientes calurosos pueden desencadenar un empeoramiento temporario de los síntomas de EM, al igual que el ejercicio y las fiebres causadas por enfermedad o infección.

Usted puede tomar medidas para controlar la sensibilidad al calor

La sensibilidad al calor puede controlarse para evitar síntomas de EM provocados por el calor. Asimismo, puede tomar medidas para controlar los síntomas a medida que se presenten a fin de aliviar lo antes posible una exacerbación temporaria a causa del calor.

A continuación, compartimos algunas formas de controlar la intolerancia al calor y mejorar su calidad de vida.

1. Refrésquese de inmediato si empiezan los síntomas de intolerancia al calor

Cuando esté en plena exacerbación de EM provocada por el calor, puede tomar unas cuantas medidas inmediatas para refrescarse. Intente lo siguiente:

  • Tomar bebidas frías
  • Chupar cubos de hielo o paletas heladas
  • Darse una ducha o baño refrescante
  • Rociarse con agua helada
  • Comer postres y tentempiés fríos

Si opta por una ducha o baño refrescante, asegúrese de no provocar un choque en su sistema por aplicarse agua fría demasiado rápido. Empiece con agua tibia, y luego baje lentamente la temperatura.

Obtenga ideas sobre refrigerios saludables para la EM.

2. Mantenga un horario flexible para sus actividades diarias

Si establece un horario que tenga en cuenta tanto como sea posible la sensibilidad al calor y la temperatura, puede reducir su riesgo futuro de seudoexacerbaciones. Trate de evitar actividades en el exterior durante las horas calurosas del día. Cerciórese de tomarse su tiempo con los quehaceres diarios o actividades cotidianas para prevenir el sobrecalentamiento. Planifique con anticipación el tiempo adicional que necesitará para llevar a cabo las actividades a un paso tranquilo.

Puede ser beneficioso informar a familiares y amigos que tal vez deba restringir las actividades sociales de modo que se adapten a su sensibilidad al calor.

Pida a su médico o neurólogo consejos sobre cómo protegerse contra el calor que podría desencadenar síntomas durante las actividades diarias.

3. Sea consciente de cuándo y dónde hace ejercicio

Si quiere llevar a cabo una rutina de ejercicios, hágalo en un ambiente fresco. Evite las habitaciones donde haga calor o con mala ventilación. Si planea alguna actividad al aire libre, intente realizarla temprano durante las horas más frescas de la mañana o durante el atardecer.

No haga demasiado esfuerzo y tome descansos con frecuencia. Según comentó un miembro de MyMSTeam: “Mi fisioterapeuta un día notó que no descanso entre una actividad y otra. Simplemente sigo adelante. Tuvimos una charla en serio y entendí que debo permitirme descansar”.

Asegúrese de tener agua a mano cuando haga ejercicio. Considere apartar 30 minutos después de su rutina de ejercicios para darse un baño o ducha refrescante, lo que puede ayudarle a disminuir de manera segura su temperatura central y mantenerse fresco.

Las personas con sensibilidad al calor deben evitar los jacuzzis o saunas en el gimnasio o centros recreativos.

4. Utilice el control de climatización en casa

Si vive en un clima cálido o húmedo, piense en la posibilidad de invertir en aire acondicionado o ventiladores, los cuales le ayudarán a regular la temperatura del aire de su hogar y limitar sus probabilidades de tener desencadenamientos a causa del calor ambiental. Incluso un aire acondicionado en una habitación puede ofrecerle un lugar para mantenerse fresco.

“Compré un aire acondicionado personal y portátil para mi hogar —comentó un miembro de MyMSTeam—. Lo más conveniente es que puedo llevarlo conmigo a cualquier parte, para contar con una manera de evitar un golpe de calor o sobrecalentamiento”.

5. Considere la ropa refrigerante

Si le parece que las prendas ligeras y la ropa transpirable no son suficientes para lidiar con el calor, puede tener en cuenta la ropa refrigerante especializada. Estas prendas a menudo se fabrican específicamente para las personas con EM. Contienen una sustancia gelatinosa que se puede enfriar antes de usar y que ofrece efectos refrescantes durante varias horas o días. Estos productos refrigerantes se fabrican de varias formas, que pueden ser envolturas para el cuello, pañuelos, sombreros y pulseras.

Si necesita más enfriamiento que el que ofrece la ropa forrada de gelatina, le recomendamos que pruebe los chalecos refrigerantes, los cuales se parecen a un chaleco e incluyen almohadillas de enfriamiento alimentadas con baterías que mantienen fresco su tronco. Dado que los chalecos refrigerantes suelen diseñarse para los atletas, por lo general se mantienen cómodos incluso al realizar actividades físicas intensas. En investigaciones se ha señalado que las personas con EM que usan chalecos refrigerantes pueden caminar una mayor distancia y por más tiempo sin agotarse que sus pares.

“Tengo un chaleco refrigerante y llevo ventiladores conmigo todo el tiempo”, indicó un miembro de MyMSTeam. Otra miembro compartió una manera creativa de lograr un efecto similar: “Me estaba costando mucho conseguir un chaleco refrigerante, así que fui a una tienda de segunda mano, compré un chaleco de pesca y lo llené de compresas frías. ¡Ja, ja, ja! Guardo mi chaleco todo el tiempo en el congelador”.

Todas las personas con EM sienten los síntomas de manera distinta, y lo que funciona para una persona podría no ser adecuado para otra. Es posible que deba utilizar el proceso de prueba y error para descubrir lo que mejor le funcione.

Hable con otras personas que entienden su situación

En MyMSteam, la red social para las personas con EM y sus seres queridos, más de 206,000 miembros se congregan para hacer preguntas, dar consejos y contar su historia a otras personas que entienden lo que es llevar una vida con EM. Puede hacer preguntas, aportar conocimientos e incluso entablar una simple conversación con personas que verdaderamente saben lo que es tener la EM.

¿Afecta el calor sus síntomas de EM? ¿Tiene algún consejo para mantenerse fresco que desee compartir? Empiece la conversación dejando un comentario a continuación o haciendo una publicación en su página Activities [Actividades].

Posted on February 13, 2024
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Amit M. Shelat, D.O. es miembro distinguido de la Academia Estadounidense de Neurología (American Academy of Neurology, AAN) y el Colegio de Médicos de los Estados Unidos (American College of Physicians, ACP). Reseña ofrecida por VeriMed Healthcare Network. Más información sobre él aquí.
Joan Grossman es redactora independiente, cineasta y asesora radicada en Brooklyn, Nueva York. Más información sobre ella aquí.

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